Estos días se ha puesto de moda este tema. Cuando gente que no se dedica a la enseñanza de las matemáticas y, en muchas ocasiones, ni siquiera a la enseñanza, quiere decidir sobre cómo enseñar las matemáticas.
España siempre ha sido un país de extremos. Vamos a escribir y colgar varios vídeos sobre esto. Hemos pasado en poco tiempo de «la letra con sangre entra» a «los niños deben estudiar lo que les motiva y encontrar sus respuestas». Y, ni tanto ni tan calvo. Nos equivocábamos entonces, y nos equivocamos ahora.
En este caso la alarma ha surgido cuando en una propuesta de cambio de los planes de estudio, se han introducido palabras muy «de moda» como la «perspectiva de género» o «socioemocional». Palabras que, a priori, poco tienen que ver con la asignatura y con el programa.
Uno, que enseña matemáticas, en tres sistemas diferentes (inglés, español y bachillerato internacional) se pregunta que, con todo lo que hay que reformar en el programa, ¿por qué se meten en estos fregaos? La única conclusión lógica es que parece haber más un interés por crear polémica con unos y «quedar bien» con otros que en cambiar los problemas de base. Que existen y son muchos.
No entramos en si es correcto el cambio que se quiere hacer o no, porque no se sabe nada de los detalles (otra razón por la que creemos que es más polémica y orientado a los focos que ganas de mejorar la enseñanza).
Pero no hemos podido evitar acordarnos de este corto que se hizo a modo de sátira y, en muchos casos, parece reflejar la realidad.
Por favor….que dejen de usar los partidos la enseñanza y sus reformas con fines partidistas. Cada reforma parece peor que la anterior y ninguna parece encaminada a mejorar nada para los alumnos.