Aunque la implementación del idioma español en las aulas chinas comenzó en 2010, ha sido ahora cuando la materia se ha convertido en una asignatura obligatoria en muchas escuelas de primaria chinas.
Los niños empiezan sus clases de español desde el primer año de primaria, con 5 o 6 años de edad, según expertos es la edad perfecta para iniciarse en un nuevo idioma de una manera sencilla ya que su capacidad de aprendizaje y asimillación es mayor y más rápida que la de los adultos. Con esta iniciativa se pretende brindar a los niños una herramienta más con la que ampliar sus horizontes educativos y abrirse camino en las relaciones internacionales en el mundo moderno.
Además de las clases tradicionales en las que los alumnos deben aprender a leer, escribir y expresarse en castellano (de los 6 a los 9 años se espera que los alumnos sean capaces de leer textos sencillos, hacer descripciones fáciles y expresar sus gustos de manera oral y escrita, por lo menos); las escuelas organizan diversas actividades que ayuden en el aprendizaje del español de una forma más divertida y amena para los pequeños: obras de teatro, musicales, recitales de poemas y hasta óperas en español.
De momento es una medida adoptada por escuelas de prestigio (e incluso algunas universidades), que se espera sigan otras muchas, creando una creciente demanda de profesores de español en China.