Desafortunadamente no es un método que podamos aprovechar para ganar un premio de la lotería (ahora que se acerca la de Navidad), pero sí un ejemplo de cómo unas mentes brillantes pudieron aprovecharse de un error legal y ganar grandes cantidades de dinero.
Voltaire
Nos remontamos a 1727, cuando al que hoy conocemos como mayor exponente de la Ilustración, Voltaire por supuesto, era un abogado y escritor que aunque provenía de buena familia (aunque no tremendamente adinerada) había pasado por ciertos problemas económicos y legales que le habían llevado a estar en prisión en un par de ocasiones e incluso a un destierro temporal en Gran Bretaña. También en 1727, y tras varios años de crisis económica en Francia, la Corona redujo las tasas de interés de los bonos y como consecuencia su valor en el mercado disminuyó drásticamente, todo con el fin de ahorrar dinero. Como la caída del precio supuso problemas (redujo la confianza en la economía francesa tanto a nivel nacional como internacional) el ministro de Finanzas, Michelle Robert Le Pelletier-Desforts, decidió que los propietarios de los bonos podrían comprar un billete de lotería con un coste calculado en función de los mismos, en caso de que el boleto fuera el ganador, sería premiado con el valor original del bono en cuestión y un extra de 500.000 libras francesas.
En ese momento entra en escena De La Condamine, que aunque hoy sea reconocido como otro de los grandes de la Ilustración, por aquél entonces era un matemático desconocido. Fue él quien descubrió el error y quien con ayuda de Voltaire y otros inversores llevó a cabo la brillante estafa.
De La Condamine
Si cada boleto de lotería costaba 1/1000 del valor del bono y todos los boletos tenían las mismas posibilidades de ganar el mismo premio, ¿por qué no comprar el mayor número de bonos devaluados y hacerse con todos los boletos baratos posibles? Indudablemente esto les brindaría más posibilidades de ganar el premio, sin invertir apenas dinero y asegurándose una importante ganancia. El único problema era que para comprar la lotería había que ir a un notario y en París por aquél entonces no había tantos, cuestión que solucionó Voltaire llegando a un «acuerdo» con uno de ellos.
Con todo organizado, todos los meses Voltaire visitaba a su notario de confianza y compraba una gran cantidad de boletos. El día 8 de cada mes, cuando se realizaba el sorteo, el premio casi siempre recaía en uno de los boletos de loteria del grupo de De La Condamine y Voltaire, haciéndoles ricos a todos. La estafa duró meses y no sabemos cuánto más hubiera podido prolongarse de no ser porqué Voltaire no supo contenerse y en vez de atenerse a la costumbre de firmar la parte trasera de los boletos con una frase que diera buena suerte, decidió escribir frases del tipo «Aquí está la buena idea de M.L.C» (refiriéndose a Marie De La Condamine) o «Larga vida a M. Pelletier-Desforts» entre otras lindezas.
Las pistas guiaron a la justicia al «grupo de inversores» y estos fueron llevados a juicio (¡mientras seguían jugando y ganando!), aunque el juez les dió la razón ya que en realidad no estaban haciendo nada ilegal, solo aprovechar un descuido ajeno. Como consecuencia Pelletier-Desforts fue expulsado fulminantemente y la lotería de los bonos llegó a su fin.
Pero para aquél entonces los flamantes ganadores se calcula que habían acumulado cerca del medio millón de libras de por aquél entonces ¡cada uno!. Gracias a esos, vamos a llamarlos «ingresos extra», Voltaire pudo hacer buenas inversiones que le permitieron dedicarse el resto de su vida a escribir y morir siendo uno de los personajes más poderosos de Francia. De La Condamine sin embargo organizó una expedición a Ecuador para medir el meridiano y comprobar que la Tierra no es una esfera perfecta. Aprovechó de paso para convertirse en el primer científico en cruzar el Amazonas y durante su viaje descubrió el caucho (material que revolucionó la industria) y la quinina, con la que trató la malaria durante 200 años (y que hoy se ha convertido en un ingrediente imprescindible en un gin tonic), además estableció los fundamentos para el actual Sistema Métrico Decimal.
Sin duda una gran anécdota de estos personajes tan conocidos.
Os recordamos que ya explicamos en este artículo la probabilidad de que te toque la lotería de Navidad hoy en día.