Desde hace años el mundo de la tecnología parece ser el que más empleo ofrece y su demanda de trabajadores nunca parece cubrirse. Se anima a los estudiantes a elegir cursos relacionados con tecnología, se intenta promover un especial interés en las mujeres para que cursen este tipo de estudios… y aún así, la mayoría de estudiantes universitarios españoles elige estudiar una carrera de letras (Artes, Humanidades, Ciencias Sociales y Jurídicas). Pero, ¿se puede conciliar estos dos mundos? ¿es posible estudiar una de estas carreras y tener un futuro laboral en tecnología?. Pues la respuesta es: por supuesto que sí.
Aunque llevemos mucho tiempo dando gran importancia a los estudios STEM (science, technology, engineering and mathematics), el estudio de las humanidades se está revalorizando en los STEAM (con A de Arte). Son cada vez más los expertos que defienden la importancia del pensamiento creativo, la perspectiva humana, del contexto social y cultural… incluso el MIT incluye clases de humanidades y arte en sus carreras tecnológicas porque las considera vitales para promover un ambiente creativo en ciencia e ingeniería.
Es importante la unión de estas dos ramas por el magnífico resultado final que pueden obtener: una mente de letras y creativa entiende su sociedad y puede detectar qué invento se necesita y un ingeniero puede construirlo. Los ingenieros trabajan en Inteligencia Artificial, pero los lingüístas, filósofos, psicólogos, etc. también, y esto es solo por poner un ejemplo.
Tal vez la clave de todo esto reside en estudiar aquello que en realidad te interesa, no limitarse, seguir formándose sin que importe tu edad o que ya tengas un puesto de trabajo… si eres bueno en lo que haces, seguro que encuentras un puesto de trabajo. Los perfiles «mixtos» (conocimientos tecnológicos y de letras, y viceversa, que no pasa nada por ser de letras y estudiar matemáticas) son los más valorados por su versatilidad y parece que es en ese equilibrio donde se encuentra el futuro del mercado laboral.