Debido a la situación de precariedad en el mundo laboral, son muchos los que han optado por formarse con la finalidad de encontrar un empleo o mejorar el que ya tienen. Desafortunadamente siempre hay quien sabe cómo aprovecharse de la situación, ya se sabe, la famosa picaresca española, y sacar beneficios de las esperanzas ajenas de la peor manera.
Hablamos de los casos de timos en los cursos de formación. Esos que se ofrecen a bombo y platillo, que prometen una titulación oficial, que prácticamente te aseguran un puesto de trabajo nada más terminar el curso, y todo ello por un «módico» (sarcasmo) precio. No es la primera vez que pasa y que los clientes se sienten estafados, que pierden su tiempo y su dinero, que los centros de formación acumulan denuncias… pero parece que no aprendemos. Es comprensible que en épocas de crisis laboral todo el mundo busque la manera de mejorar su situación, lo que no es comprensible es que unos cuantos saquen tajada con malas artes, por eso antes de inscribirse en un curso SIEMPRE hay que informarse bien, especialmente para aquellos cursos que «estén de moda» e incluso para los que preparan oposiciones:
- Infórmate en diferentes centros, aquello de busca y compara
- No te cortes: pregunta cuál es su método de enseñanza, qué tipo de profesores imparten el curso, cuál es su experiencia, cómo gestionan su bolsa de empleo…
- Revisa las opiniones de los usuarios en profundidad, en muchas ocasiones una unanimidad apabullante de comentarios positivos debería hacerte desconfiar de la fiabilidad de las fuentes.
Y sobretodo, siempre, SIEMPRE HAY QUE LEER EL CONTRATO ANTES de firmarlo. Cuando piensas que estás pagando un curso completo por una cierta cantidad de dinero, en estos casos en realidad estás pagando un material (generalmente un libro o un archivador con fotocopias), y estamos hablando de miles de euros que una vez se descubra la estafa no podrás recuperar porque en el contrato figura que te cobran en concepto de material.
