El documental La Nueva Educación del colectivo Yo estudié en la pública nos ha parecido tan interesante y esclarecedor que queremos compartirlo con vosotros.
Mientras que la educación se supone un derecho para todos (y además una necesidad, una prioridad…), parece convertirse cada día más en una lucha entre centros educativos para ver quién es mejor. No nos malinterpretéis, la competitividad está bien pero enfocada de una manera sana (cuando supone trabajar para mejorar tus propias marcas, por ejemplo) pero no cuando se convierte en un concurso de popularidad que además afecta a la enseñanza de aquellos que son el futuro, los que mañana serań trabajadores, educadores, médicos, los que nos gobernarán…
A menudo vemos en la academia casos de alumnos de colegios privados en situaciones extremas: el centro decide por ellos a qué exámenes deben presentarse y a cuáles no, estudiantes a los que les comunican que no van a poder seguir estudiando en dicho centro porque sus notas no son tan altas como ellos consideran necesarias, etc. A veces confundimos estas exigencias con una búsqueda de la excelencia, cuando en la gran mayoría de los casos lo que ocurre es que un alumno con unas notas bajas supone bajar la media del centro, y para todos esos colegios dirigidos por grandes empresas priman los resultados, única y exclusivamente.
Esto empieza a suceder no solo en los colegios privados sino también en la enseñanza pública, donde de un tiempo a esta parte se llama a los profesores a hacer un gran cambio sin terminar de aclarar cuál, se centran en buscar y premiar a los mejores (ya sean alumnos o profesores), se crean grandes diferencias entre los alumnos con mejores resultados apoyando su trabajo y prestando menos atención a quienes no han obtenido la nota que ellos consideran apropiada para mantener su media, interfieren grandes empresas con un supuesto carácter filantrópico… en resumidas cuentas, la enseñanza (incluida la pública) se ha convertido en un negocio más preocupado en generar beneficios que en educar.
Pero ellos lo explican mucho mejor que nosotros: