Una introducción prometedora.

Mucho se podría decir de los trabajos que se piden en clase… seguro cuando los profesores los corrigen se encuentran con más de una sorpresa, sobretodo en esos casos en los que quien tenía que hacer el trabajo lo ha dejado para última hora y el tiempo apremia.

Y sorprendido se debió quedar el profesor que tuviera que corregir el ejemplo que compartimos hoy, ya que si esta es la introducción no queremos ni pensar cómo será el resto. Eso sí, sinceridad y ganas no le faltan a este alumno.

Agárrense a su asiento…

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