Antes de continuar, la RAE deja claro que su uso es propio de la jerga juvenil y que debe limitarse al lenguaje informal y coloquial (la aceptación no significa que sea excusa para utilizarlo en el trabajo, por ejemplo).
Y ahora sí, procedemos. Como respuesta a la duda de un usuario de Twitter sobre el uso de la palabra puto como intensificador, la RAE responde:
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Lo que no recoge aún en su diccionario es su uso como adverbio, que tiene un significado muy parecido a «muy», pero sí especifica cómo debería utilizarse:
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No cabe duda de que desde sus redes sociales la RAE mantiene una relación cercana con los usuarios y parece adaptarse a los cambios mejor y más rápido que en el pasado, cosa que por otro lado levanta muchas ampollas. Pero no olvidemos que este tipo de medidas no significan que de permiso a que se utilicen ni que se recomiende su uso o que pierdan su categoría de palabras malsonantes, sino que se trata simplemente de un reflejo de cómo habla la sociedad que debe quedar registrado.