Estudiante de ciencias, 18 años de edad, de Murcia, Ignacio Martínez Leandro ha sorprendido convirtiéndose en el ganador del Concurso Ciceroniano a nivel nacional y quedando en décimo puesto en su versión mundial celebrada en Italia, ambos consistentes en la traducción de textos en Latín de alta dificultad.
Se trata de un gran logro ya que Ignacio solo ha cursado una clase hora y media de latín a la semana durante año y medio, por Skype y gracias a los ánimos de su padre y a la oferta de clases gratuitas de Aurelio Bermejo, un profesor jubilado que había puesto un anuncio. Si el primer puesto en el concurso nacional fue importante, el décimo puesto en el mundial no lo es menos: quedar por detrás de 9 alumnos italianos y alemanes que llevan años estudiando latín frente a su corta preparación (que para colmo en ocasiones se vio perjudicada por cuestiones de salud, sufre diabetes tipo 1), además en los 39 años de historia del certamen es el segundo alumno español que consigue quedar entre los 10 primeros puestos.
Este triunfo no es solo porque el ganador tenga una gran inteligencia, es que hay que sumarle la motivación, el interés por aprender, el esfuerzo tanto por parte del alumno como del profesor y el uso de una metodología adecuada, entre otros factores.