Hay un sabio refrán que reza «renovarse o morir», y eso es lo que ha debido pensar la Facultad de Educación de la Universidad Complutense de Madrid. Los tiempos han cambiado y se necesitan nuevas formas de enseñar y educar a las jóvenes generaciones y solucionar problemas tales como el absentismo y la tasa de fracaso escolar, el sistema educativo español siempre ha parecido estar un poco anclado al pasado y renovarse más bien poco, pero ahora la UCM quiere romper con ese anacronismo y enfocarse en el futuro con su nuevo proyecto: Hiperaula.
Con el fin de fomentar el aprendizaje colaborativo ha reformado una decena de aulas de la Facultad de Educación, donde se forman los futuros profesores, convirtiéndolas en espacios grandes y con mobiliario flexible que facilite el movimiento y la libertad, las agrupaciones flexibles de los alumnos ya sea por proyecto, asignatura, etc., que favorezca una transición sencilla entre el papel, audio, video, actividades orales, buscando la codocencia (más de un profesor en el aula con grupos heterogéneos de estudiantes). Con este método se busca que el alumno asimile el conocimiento a través de la experiencia propia en base a la resolución de problemas y retos, trabajando en una diversidad de proyectos que requieran de distintas capacidades y materiales ya sea en grupo o de manera individual… y la mejor manera de llevar todas estas novedades a los alumnos más jóvenes es empezando por los maestros encargados de formarles.